El Papa pide a los jóvenes que sean "sembradores de esperanza"

El Vía Crucis de la Jornada Mundial de la Juventud que tuvo lugar en el parque de Blonia, en el este de Cracovia, volvió a estar cargado de simbolismo. La escenificación de las catorce estaciones que recorrió Jesús hasta la muerte en la cruz empezó con un grupo de refugiados sirios acogidos en Roma por la Comunidad de Sant Egidio. Y como no, el Papa Francisco se refirió a ellos en su discurso de clausura, e hizo un llamamiento a los jóvenes.

"En esta tarde, Jesús abraza con especial amor a nuestros hermanos sirios, que huyeron de la guerra. Los saludamos y acogemos con amor fraternal y simpatía", afirmó Bergoglio, ante el aplauso espontáneo de los miles de jóvenes presentes en la explanada.

"Hoy la humanidad necesita hombres y mujeres, y en especial jóvenes como vosotros, que no quieran vivir sus vidas a medias", dijo el pontífice. "Jóvenes dispuestos a entregar sus vidas para servir generosamente a los hermanos más pobres y débiles, a semejanza de Cristo", continuó. Y fue directo en su mensaje: "Yo querría que vosotros fuerais diseminadores de esperanza".

Según Bergoglio, los jóvenes católicos están llamados a servir a Jesús crucificado en "toda persona marginada". Y enumeró varios ejemplos para que no quedara duda: "Quien esté excluido, tiene hambre o sed, está desnudo, preso, enfermo, desempleado, perseguido, refugiado o emigrante".

Las 21 hectáreas del parque de Blonia sirvieron de escenario para el segundo encuentro de la Jornada Mundial de la Juventud entre el papa y los cientos de miles de jóvenes que han acudido a la ciudad polaca desde 187 países, según datos de la organización. Esta gran zona verde fue fundada en 1889 por el filántropo polaco, Henryk Jordan, y rehabilitada tras la Segunda Guerra Mundial.


[ Mónica Bernabé ]