La alegría por la liberación del padre Maccalli. Seguimos rezando por todos los secuestrados

 

La Comunidad de Sant'Egidio se alegra de la liberación del padre Pier Luigi Maccalli y Nicola Chiacchio, liberados ayer junto a otros dos rehenes (la cooperante francesa Sophie Petronin y el exministro de Finanzas maliense Soumaïla Cissé) y felicita a quienes han trabajado para su liberación.

 

El sacerdote de la Sociedad de las misiones africanas fue secuestrado hace más de dos años por un grupo yihadista, mientras se dedicaba a atender a la población en la parroquia de Bomoanga, en la diócesis de Nyamei. En muchos países africanos, los misioneros realizan una labor preciosa junto a los más pobres y enfermos. Representan una presencia europea amigable y gratuita en el continente africano, que corre el riesgo de debilitarse por las difíciles condiciones en las que trabajan.

 

Todavía hay una gran preocupación por quien sigue en manos de los secuestradores, en diferentes partes del mundo. Por todos ellos, la Comunidad de Sant'Egidio sigue rezando y esperando un regreso rápido a casa.