Esta mañana han llegado provenientes de Lesbos (Grecia) 34 refugiados con los corredores humanitarios. Entre ellos había algunos menores no acompañados

Serán acogidos en varias regiones italianas con itinerarios de integración personalizados

Esta mañana, a las 9.30, han llegado a Fiumicino, con los corredores humanitarios, treinta y cuatro refugiados de la isla griega de Lesbos. Son de trece nacionalidades (entre otras, Afganistán, Mali, Congo, Somalia y Siria) y serán acogidos en Italia siguiendo el modelo, que ya ha demostrado su éxito, de los corredores humanitarios, que desde febrero de 2016 ha permitido que más de 3.700 personas lleguen de manera segura, y a salvo de traficantes de personas, a Italia, Francia, Bélgica y Andorra.

Con este último corredor humanitario –que ha sido posible gracias a un protocolo que firmaron el 22 de septiembre de 2020 la Comunidad de Sant’Egidio y el ministerio de Interior– llegan a Italia también 8 menores no acompañados y 7 jóvenes que acaban de alcanzar la mayoría de edad hace pocas semanas, mientras esperaban su traslado. Se trata de muchachos y muchachas que llegaron a Grecia en 2019, que hicieron difíciles viajes por Asia, África u Oriente Medio en los que sufrieron maltratos, explotación y violencia. Los menores serán acogidos por familias de la Asociación Comunidad Papa Juan XXIII y en centros familiares de algunos municipios toscanos  que junto a la red de tutores voluntarios de la Toscana, sin utilizar fondos públicos, han ofrecido su disponibilidad.

Los refugiados, familias e individuos, serán acogidos en Toscana, el Lacio, el Véneto, la Emilia-Romaña, las Marcas, los Abruzos y el Piamonte. Todos empezaron su itinerario de integración ya en Grecia: prepararon su partida estudiando italiano con un profesor de la Comunidad de Sant’Egidio que se conectaba por internet cada día para impartir clases de lengua.

El grupo que ha llegado hoy lo ha hecho pocos días antes de que empiecen las actividades veraniegas de Sant’Egidio en Atenas y Lesbos, donde –hasta finales de agosto– 200 voluntarios de toda Europa irán a repartir alimentos, hacer talleres educativos para los niños, clases de lengua y hacer excursiones para los residentes en los campos o para los solicitantes de asilo.

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