Han llegado al alba: 139 personas, refugiados de países del Cuerno de África, donde conflictos olvidados y poco mediáticos provocan gran sufrimiento.
Casi la mitad de ellos son niños. ¡El más pequeño tiene tres meses! Se han salvado de las penurias de los campos de refugiados y de los traficantes de personas gracias a los corredores humanitarios, fruto del Protocolo en el que la Comunidad de Sant’Egidio y la CEI coordinan una gran acción humanitaria entre Italia y África.
Les esperaban familias italianas, parroquias, grupos que con simpatía y generosidad ofrecen una acogida difusa y "familiar" que es la verdadera vía de integración.
AYUDA A LOS CORREDORES HUMANITARIOS