Durante un año la pandemia ha perturbado los sistemas de salud en todo el mundo y se ha cebado a menudo allí donde éstos son débiles o en construcción. En África, la emergencia sanitaria es abordada por DREAM, el programa de salud de la Comunidad de Sant'Egidio, con sus objetivos primordiales: calidad e igualdad de acceso a la atención y las curas.
En África, la presencia del virus SARS-CoV-2 se confirmó el 14 de febrero de 2020. El primer caso se detectó en Egipto, en África subsahariana, y en Nigeria.
Se han reportado ya más de 4 millones de casos y más de 100.000 muertes confirmadas en todo el continente, más de la mitad en África subsahariana.
La falta de servicios de salud, personal capacitado, recursos y datos genera enormes dificultades para controlar y monitorear la transmisión del virus.
Desde el principio, el programa DREAM de la Comunidad de Sant’Egidio activó el cribado y el diagnóstico de COVID-19 en sus laboratorios, junto con los servicios básicos de salud para personas con VIH y otras enfermedades.
La escasez inicial de materiales y la carga añadida de trabajo son dificultades a las que la Comunidad de Sant'Egidio ha sabido sobreponerse en poco tiempo, respondiendo rápida y eficazmente a la emergencia, allí donde está presente, es decir en diez países africanos. El programa se ha basado en la experiencia adquirida en la lucha contra el VIH, la tuberculosis y el ébola.
En colaboración con los gobiernos africanos, los centros se han convertido en puntos de referencia en la lucha contra el virus, organizados para el cribado diario de los pacientes y la vacunación; comprometidos en la formación del personal sanitario y en la sensibilización de la población, para despejar el campo de los prejuicios y las fake news que, incluso en la lucha contra las enfermedades endémicas, siempre han sido un obstáculo para la prevención y el tratamiento.
Son signos de solidaridad, nacidos de la lección extraída de esta época. “Nadie está a salvo de esta epidemia, nos guste o no. Habrá que tener esto en cuenta y trabajar juntos para que el derecho a la salud sea verdaderamente un derecho de todos, para que todos vivamos mejor”, dijo Paola Germano, Coordinadora del Programa.
DREAM, que ha obtenido certificaciones relevantes de calidad, sigue convencido de que los tratamientos eficaces solo pueden garantizarse con altos niveles de rendimiento y estándares científicos, con el objetivo de asegurar el acceso a una población cada vez más numerosa. La igualdad de acceso a las pruebas y las vacunas es un nuevo desafío, alrededor del cual se relanza el "sueño" de DREAM de dar estructura a los sistemas de salud africanos.
