En el Día Internacional de la Paz, establecido por las Naciones Unidas en 1981, la Comunidad de Sant'Egidio se une al llamamiento lanzado por el secretario general de la ONU, Antonio Guterres, cuyas alarmantes palabras comparte.
Una «tarea inmensa» es la que se presenta a los jefes de estado reunidos en la Asamblea General de las Naciones Unidas ante el riesgo no tan remoto de una catástrofe nuclear, el agravamiento de la guerra en Ucrania y los muchos conflictos en curso, partes de esa «tercera guerra mundial a trozos», cuyas trágicas consecuencias en la vida de millones de personas denuncia el papa Francisco desde hace mucho tiempo. Pero incluso ante el cambio climático, una verdadera guerra del hombre contra la Tierra, es esencial dar un nuevo impulso al diálogo multilateral y a la colaboración entre los pueblos, dejando de lado los intereses particulares de grupos o naciones.
La Comunidad de Sant'Egidio, que lleva años participando en procesos de mediación y reconciliación, reafirma su compromiso con las víctimas de los conflictos, trabaja para acoger a refugiados y migrantes y fomenta el diálogo entre las naciones y las religiones, como ocurrirá del 23 al 25 de octubre en Roma, en el encuentro internacional de oración por la paz de las religiones del mundo, que llevará por título«El grito de la paz».
PARA SABER MÁS
Encuentro internacional «EL GRITO POR LA PAZ», Roma, 23-25 de octubre de 2022
