Milà respon al racisme amb un #20maggiosenzamuri: el realisme de l'acollida

Sant'Egidio també participa en la manifestació antiracista i en favor de la integració: "Com més comunitat és la ciutat, més segura és"

Unas 100.000 personas desfilaron el sábado 20 de mayo por las calles de Milán en la manifestación "Juntos sin muros", una marcha antirracista que quiso destacar la voluntad de acoger e integrar a los inmigrantes, en el ciudad donde desde octubre de 2013 han pasado unos 125.000 refugiados.

La Comunidad de Sant'Egidio, con los niños de las escuelas de la paz, familias gitanas y los inmigrantes que van a la escuela de italiano de la Comunidad también participaron en la manifestación. Entre ellos había un numeroso grupo de refugiados del centro de acogida de Bresso: son jóvenes de varios países africanos y de Bangladesh que asisten a las clases de italiano de Sant'Egidio en el centro.

"Milán ha vuelto a nacer abriéndose al mundo, ya no se echará atrás – dijo desde el palco de la manifestación Giorgio Del Zanna, de la Comunidad de Sant'Egidio, que añadió–. A la maldad rencorosa, Milán a res puesto con el realismo concreto de aquellos que no quieren sufrir la historia sino que quieren guiarla, mirando al futuro hecho de intercambios, relaciones y pluralismo".

En Milán en los últimos años la Comunidad de Sant'Egidio ha acogido a más de 5000 refugiados en los locales del memorial de la Shoá. Es un trabajo de acogida que acompaña a la iniciativa de los corredores humanitarios, activos y a nivel nacional y ahora a nivel europeo: "Un camino concreto y practicable para acceder de manera segura y reglada, – recordó Del Zanna– y también corredores en la ciudad que unen a las personas, hay quien está bien y a quien no lo está, antiguos y a nuevos italianos. Cuanto más comunidad es la ciudad, más segura es".