Occorre rigettare la cultura dello scarto e avere cura delle persone che soffrono le più dolorose disuguaglianze

Las palabras del papa Francisco
privilegiando con pazienza i processi solidali rispetto all’egoismo degli interessi contingenti

Precisamente en  este 2017 se celebra   el 50 ° aniversario de la encíclica Populorum  Progressio de Pablo VI.  La encíclica,  explicando la visión cristiana de la persona, resalta  la noción de desarrollo humano integral y la propone como nuevo nombre de la paz. En este documento memorable y actualísimo, el Papa brindaba  la fórmula sintética y feliz de que  “el desarrollo no se reduce al simple crecimiento económico. Para ser auténtico, debe ser integral, es decir, promover a todos los hombres y a todo el hombre.

Es  necesario, pues,  en primer lugar rechazar la cultura del descarte  y ocuparse de las personas y de los pueblos que sufren las desigualdades más dolorosas, a través de una labor  que dé  prioridad, con paciencia, a los procesos solidarios en vez de al egoísmo de los intereses contingentes. Se trata, al mismo tiempo, de  integrar la dimensión individual y la social mediante el despliegue del principio de subsidiariedad, favoreciendo la contribución de todos como individuos y grupos. Por último, debemos promover lo humano  en su unidad inseparable de cuerpo y alma, de contemplación y  acción.

Así es como un progreso eficaz e inclusivo puede hacer posible la utopía de un mundo libre de terribles instrumentos mortales, a pesar de las críticas de aquellos que consideran que los procesos de desmantelamiento de los arsenales son idealistas. Es siempre válido el magisterio de Juan XXIII, que indicaba  con claridad el objetivo de un desarme integral, cuando afirmaba: ” Ni el cese en la carrera de armamentos, ni la reducción de las armas, ni, lo que es fundamental, el desarme general son posibles si este desarme no es absolutamente completo y llega hasta las mismas conciencias; es decir, si no se esfuerzan todos por colaborar cordial y sinceramente en eliminar de los corazones el temor y la angustiosa perspectiva de la guerra. (Enc. Lett. Pacem in Terris, 11 de abril de 1963, 61).

Extracto del discurso del papa Francisco en el simposio internacional "Perspectivas para un mundo libre de las armas nucleares y para el desarme integral" del 10/11/2017 (texto completo>>)