PERSONAS CON DISCAPACIDAD

Día mundial de las personas con discapacidad, un gran recurso humano, afectivo y cultural

El 3 de diciembre se celebra el día mundial de las personas con discapacidad, que instituyeron en 1981 las Naciones Unidas con el objetivo de promover los derechos de estas personas para que tengan una plena inclusión.
 El trabajo de las Naciones Unidas  llevó  en 2006 a adoptar la Convención de derechos de las personas con discapacidad, que  impulsó aún más los derechos y el bienestar de las personas con discapacidad al afirmar el principio de igualdad y la necesidad de garantizar su plena y efectiva participación en la esfera política, social, económica y cultural de la sociedad. La Convención fue ratificada por 175 países. Italia la ratificó en 2009.

Desde principios de los años 80, Sant’Egidio está al lado de las personas con discapacidad.

El derecho al trabajo:

Las personas con discapacidad representan un recurso en el mundo laboral pero los problemas con los que se encuentran es una señal  significativa de la falta de inclusión social de estas personas. En 1991, con la constitución de la Cooperativa Social Pulcinella Lavoro, impulsada por la Comunidad de Sant’Egidio, se pudo reabrir en Roma un pequeño local de restauración y unos años más tarde un restaurante propiamente dicho en el centro de Trastevere, la Trattoria de Gli Amici,  que está considerado una buena práctica de inclusión laboral. La inversión en la restauración ha demostrado ser un éxito, y ha creado un modelo de inspiración para varias experiencias en Italia y en Europa. En 2017, en Amberes (Bélgica), nació Amici Coffee & Books.  En 2022 empezó una actividad de cátering en un nuevo centro de cocina para ampliar las oportunidades laborales. El 1 de diciembre de este año se inauguró la décima edición del curso de formación “Yo también valgo” para jefe de sala y de cocina.
Los Talleres de Arte, son lugares de formación donde se trabaja al mismo tiempo que se aprenden las técnicas artísticas, el estudio, la relación y la comunicación. La búsqueda de las aptitudes y potencialidades de cada uno ha llevado a muchas personas con discapacidad ante todo a comunicarse (incluso a través de la tecnología y de medios informáticos), además de experimentar un proceso de apropiación de códigos expresivos y artísticos personalizados. Las personas que han seguido este proceso han demostrado de manera cada vez más evidente una profunda capacidad de comprensión de la realidad, han desarrollado un juicio y un pensamiento propios y una mirada propia ante el mundo. En el vídeo de presentación de la exposición DIS/INTEGRATION, en la Universidad de Catania, el artista Ivan Crnic explica eficazmente cómo el arte y métodos compartidos de expresión son elementos determinantes para hacer emerger energías ocultas o no expresadas.

Mensaje del Papa para la jornada del 3 de diciembre: « Abrirnos a los talentos de las personas con discapacidad [...] tanto en la sociedad como en la vida de la Iglesia...»

“Jesús como amigo” y “El evangelio para todos”, títulos de dos libros dedicados a los itinerarios de catequesis con personas con discapacidad, sintetizan bien el trabajo y el camino eclesial   que desde hace más de 40 años  Sant’Egidio  vive con las personas con discapacidad. A través de itinerarios de catequesis personalizados y de modalidades de comunicación que tengan en cuenta los problemas de cada uno, se acompaña a las personas con discapacidad durante la preparación para recibir los sacramentos y una formación cristiana  permanente. En Nápoles, desde 2007, el primer domingo de Adviento, el obispo de la ciudad y toda la diócesis acompañan a las personas con discapacidad que reciben la confirmación.  

El 3 de diciembre, monseñor Mimmo Battaglia dará el sacramento de la confirmación en la catedral de San Genaro a 14 jóvenes que han completado un itinerario de preparación con la Comunidad. Ser amigos de Jesús y comunicar a muchos esta alegría dan muesttra de que solo incluyendo a los más frágiles se construye una sociedad más humana para todos. Decir “nosotros” y no “ellos”, pide el papa Francisco, para una plena participación de los fieles con discapacidad en la vida de la Iglesia.