SOLIDARIDAD

El compromiso de Sant'Egidio para humanizar la vida de los jóvenes detenidos en la prisión de menores de Dakar, Senegal

Situado en el municipio del distrito Hann Bel Air de Dakar, el centro correccional y de detención de Hann (anteriormente Fuerte B) era un antiguo fuerte colonial abandonado por el ejército francés en 1964. En 1971, se convirtió en una prisión juvenil y se adjuntó a la prisión del centro de Dakar. Es la única prisión juvenil en Senegal. El recluso más joven tiene 11 años, mientras que el mayor tiene 17.

Sant'Egidio acompaña y apoya de diversas maneras a estos jóvenes presos, procedentes principalmente de las afueras de Dakar o de zonas remotas de Senegal. Estos niños, pobres y con un bajo nivel de educación, son a menudo marginados y vistos como "delincuentes potenciales" peligrosos para la sociedad, enemigos del orden social, contra los que hay que protegerse, ser "segregados" en prisión, en lugar de verlos como niños que tienen necesidad de oportunidades y acompañamiento.

Esto es lo que hace Sant'Egidio, articulando su presencia con diversos servicios: alfabetización, formación profesional para fontaneros y, muy recientemente, catequesis para los pocos cristianos presentes allí; acompañamiento legal (que en ocasiones implica el pago de una fianza), y acompañamiento para su regreso con sus familias después de su liberación.
De esta manera ha nacido una amistad duradera, sincera y de confianza entre la comunidad y los jóvenes presos. Pero también con sus familias: muchos padres, de hecho, no pueden permitirse el lujo de ir a la capital a visitar a sus hijos y la Comunidad se convierte en el vínculo entre ellos.

Estas actividades se llevan a cabo en estrecho contacto con la administración penitenciaria, que recientemente envió una carta de reconocimiento y agradecimiento "por su compromiso de décadas con los jóvenes reclusos, que ha contribuido a humanizar las condiciones de vida en la prisión".

De hecho, la presencia de la Comunidad les asegura que, a pesar de la distancia que los separa de sus familias, pueden contar con la presencia fraterna de sus amigos de Sant'Egidio, y les ofrece perspectivas de una vida mejor, trabajo e integración social después de su estancia en la prisión.

 

Población penitenciaria y actividades de Sant'Egidio:

Actualmente, esta prisión alberga a 134 reclusos, con una capacidad real para 85. De estos:

- 102 se encuentran en prisión preventiva.
- 32 son condenados.
- 10 son ciudadanos extranjeros, principalmente malienses y guineanos de Conakry.
- 5 presos se encuentran bajo detención prolongada (más de 3 años).

Compromiso de la Comunidad:

Alfabetización: Ayudar a los jóvenes a leer y escribir.
Capacitación laboral de fontanero: proporcionar habilidades prácticas para un futuro trabajo en este sector.
Catequesis: Apoyo espiritual a los presos cristianos.
Pagar la fianza: ayudar a los reclusos y así regresar a sus hogares.
Asistencia jurídica: Defensa de los derechos de los presos.
Apoyo a la reintegración: Facilitar el regreso con la familia tras la liberación.