Sant'Egidio participa en el dolor del pueblo del Líbano por la tragedia que afectó a Beirut y se une en oración por las víctimas y sus familias

 

La Comunidad de Sant’Egidio expresa su dolor por la tragedia que ha azotado la ciudad de Beirut, testimoniando su cercanía con las familias de las víctimas de la terrible explosión y con los numerosos heridos.

Se ha golpeado el corazón de un país con el que Sant’Egidio ha hecho un vínculo significativo durante años, y al que considera un lugar privilegiado para el diálogo interreligioso, la convivencia entre diferentes pueblos y una cultura de paz.

El Líbano - como decía Juan Pablo II – “es un mensaje”. Mensaje de posible convivencia entre religiones, culturas y pueblos diferentes. Es un mensaje aún más significativo en este momento en el que, debido a la pandemia, se ha entendido mejor que no nos salvamos solos, sino que “debemos remar juntos para vencer el mal”, según la expresión que ha utilizado el Papa Francisco.

El Líbano debe ser preservado con todos los esfuerzos posibles como espacio para la democracia, la paz y el diálogo en el Oriente Medio, turbulento y desgarrado.

Los corredores humanitarios, que desde 2016 han traído a más de 2.000 refugiados sirios desde el Líbano, nos han permitido apreciar aún más a este país. El Líbano es fundamental para el equilibrio de Oriente Medio, por su voluntad de colaborar en este gran programa humanitario.

Estamos con el pueblo libanés en este trágico momento de su historia, rezamos por el Líbano y haremos todo lo posible para mantenernos cerca de los libaneses y apoyar el renacimiento de su país.

La Comunidad de Sant’Egidio, presente en Beirut, está actualmente activa en primeros auxilios a ancianos y familias afectadas por esta tragedia.