La Comunidad de Sant'Egidio manifiesta su dolor y su profunda preocupación por la desaparición de Gregorio, polaco de 40 años que fue  encontrado muerto hoy por la mañana en una calle del barrio de Esquilino. No se puede morir de frío en el centro de Roma, sin que nadie se dé cuenta. Ante el enésimo drama que se ha abatido sobre una persona que vive en la calle, Sant'Egidio lanza un nuevo lanzamiento a las instituciones para que abran urgentemente centros de acogida para dar respuesta a todos aquellos que estos días piden dormir en lugares seguros y protegidos del frío.

El gran trabajo, generoso y gratuito, que ofrecen todo el año las parroquias, comunidades y asociaciones, con la participación de un gran número de voluntarios, necesita el apoyo de una intervención pública más firme y estructural. Tras descubrir la Mafia Capital y aquellos que se han lucrado a costa de los necesitados, la Comunidad de Sant’Egidio renueva su invitación a pedir perdón a los pobres y a defensarlos en estas horas de una emergencia demasiado previsible para no ser afrontada adecuadamente, como la del frío que está llegando a la capital.