Roma. El jueves 14 de julio una marcha para decir “Contad conmigo” para parar la violencia atravesó las calles del barrio de Trullo. Algunos cientos de personas, entre las que había muchos jóvenes, ancianos, y familias enteras con niños, acudieron por invitación de la Comunidad de Sant’Egidi para manifestar con un gesto pacífico y festivo el deseo de que se pare la espiral de episodios violentos que se han producido últimamente en la ciudad. En una pancarta se podía leer el eslogan “Vivir juntos es hermoso”.
Los “Sounds for Peace”, grupo musical de los Jóvenes por la Paz de la Comunidad de Sant’Egidio, abrieron la manifestación. Luego hubo algunos testimonios: el párroco de la iglesia de San Jerónimo, que recordó las palabras de Juan Pablo II que ya habían cantado los jóvenes, “No tengáis miedo”; una estudiante, una joven rumana, muestra de una integración posible.
Pina, una anciana del barrio, que exhortaba a los más jóvenes –que eran muchos–: “Yo ya no soy joven, pero hoy digo ‘contado conmigo’ para detener la violencia. Todos podemos hacerlo. Nosotros, los más ancianos, soñamos y trabajamos por una vida mejor, hoy os pedimos a vosotros, los jóvenes: no cedáis a los prejuicios, es posible convivir, es el mejor camino”.
La larga procesión pasó por Via Monte delle Capre y Via del Trullo con los niños en primera fila llevando de manera bien visible los dibujos que habían preparado los días anteriores, con imágenes de sus sueños de paz.
Mucha gente seguía la manifestación desde las ventanas y los balcones. Muchos colgaron sábanas blancas, en signo de adhesión a la iniciativa. Alguno lo hacía de prisa, al pasar la manifestación.
El acto se cerró con una oració por la paz en el centro de la parte histórica del barrio.
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